HOMILÍA EN EL XXI DOMINGO DE TIEMPO ORDINARIO

December 31, 1969


HOMILÍA EN EL XXI DOMINGO DE TIEMPO ORDINARIO

 

«¿Quién es Jesús para nosotros?»

Queridos hermanos y hermanas en Cristo Jesús, a todos los saludo con afecto, hoy de manera especial a los adultos mayores, que tanto nos dan y nos han dado en la sociedad y las familias, que sepan que están presentes en nuestras oraciones.
Seguramente que al escuchar el Evangelio nos suena muy conocido, incluso nos lo sabemos de memoria, pero hoy para ustedes, para mí, para todos hay una pregunta, la más importante de todas en nuestra fe: ¿Quién es Cristo para cada uno de nosotros?, y los invito a que durante la celebración tengamos esa pregunta de fondo: ¿Quién es Jesús para nosotros?
Están muy de moda las encuestas, y también Jesús hizo un encuesta; después de algún tiempo de haber convivido con sus discípulos y haber salido a distintos lugares, Jesús les pregunta a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que soy yo?», y entonces empiezan a expresar lo que habían escuchado, sobre todo coincidían en que era un gran profeta, Juan el Bautista, Elías, Jeremías o alguno de los profetas, eso era lo que se oía en la calle, en los pueblos, y entonces es cuando Jesús lanza la pregunta directa: «Y ustedes, que me conocen más, ¿quién dicen que soy yo?», y entonces Simón fue quien dió la respuesta: «Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios».
Jesús se da cuenta que había respondido excelentemente bien, pero que eso no había salido de Simón, sino que había sido tocado por Dios, fue Dios quien lo inspiró para dar esa respuesta. Después de esa respuesta le cambia el nombre, y para el sentido bíblico cambiar el nombre va unido a dar una misión; se llamaba Simón y le cambia el nombre a Pedro, piedra, roca, y es cuando le da las llaves del Reino de los Cielos: «lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo, y lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo».
Entre paréntesis, hoy también quisiera pedirles que siempre en nuestras oraciones esté el Papa Francisco, que es el sucesor de Pedro. Él, cuando nos encuentra a los obispos o a las personas, siempre nos dice “recen por mi”, la carga es pesada, llevar la dirección de toda la Iglesia como sucesor de Pedro, y entonces siempre se necesita de la fortaleza de la oración. Cierro el paréntesis y regresamos al Evangelio.
Esto que sucedió sobre Cristo podemos tener tres aristas o tres ámbitos: La primera es ¿Quién es Jesús en sí mismo? ¿Su doctrina? ¿Su palabra? Esa es la primera, la segunda es ¿quién es Cristo para cada uno de nosotros? y la tercera es ¿Quién es Cristo para el hombre y la sociedad actual?
Empezamos con la primera: ¿Quién es Jesús en sí mismo? Yo creo que todos podemos responder, porque conocemos el Evangelio, y también cuando fuimos al catecismo o lo decimos en el credo, sabemos que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios y podemos platicar acerca de su doctrina, del amor a Dios y al prójimo, y podemos también platicar cuántos milagros hizo y cómo murió crucificado y el Padre lo resucitó al tercer día, podemos nosotros platicar de Jesús en sí mismo.
Pero después viene la segunda pregunta, que es una pregunta vivencial: ¿Quién es Jesús para nosotros? Y entonces podemos responder de muchas maneras: Jesús es nuestro amigo, es alguien vivo, alguien que nos acompaña, alguien que nos dice por dónde caminar, lo mejor que nos puede pasar en la vida, tener un encuentro con Cristo, porque les digo, dependiendo de esa respuesta, así va a ser nuestra vida, vamos a ser esos discípulos.
Y ahora viene la tercera pregunta, para el hombre actual, para nuestra sociedad, podemos ver que a veces Jesús es un desconocido, es alguien lejano, que no tiene importancia, y nosotros aquí tenemos la tarea como cristianos, como discípulos misioneros, de anunciar a Jesús, de anunciarlo a los demás, porque para nosotros es alguien que toca las fibras de nuestro corazón, es aquel que le da sentido a nuestra vida. Ayer que confirmaba en una parroquia les decía a los adolescentes cómo ellos, a través de los medios electrónicos, a través de internet, del celular, han conocido a Jesús y ahora es alguien significativo para ellos, también lo pueden comunicar a través de las redes sociales a otros adolescentes, a otros jóvenes.
¿Quién es Jesús para nosotros? Ojalá que hoy nos vayamos contentos de saber que Jesús es el centro de nuestra fe; Él es el camino, la verdad y la vida; Él es la luz que quiere iluminar nuestro caminar, y entonces el cristiano, incluso en esta situación tan complicada que se ha ido alargando, la pandemia, tenemos una luz, Cristo es nuestra esperanza, Cristo es el que nos da al Espíritu Santo para tener fuerza y seguir adelante.

Que también hoy nos unamos nosotros a Simón Pedro y que le digamos «Señor, tú eres el Mesías, el Hijo de Dios». Así sea.

 

+ José Antonio Fernández Hurtado

Arzobispo de Tlalnepantla